Todos hemos crecido escuchando historias sobre princesas y príncipes que un día vinieron de las estrellas para darnos magia y romance. Pero ¿sabías que hay una princesa y un príncipe que viven entre las estrellas y que sus vidas maravillosas son celebradas por muchos? Si aún no has oído hablar de La princesa y el príncipe de las estrellas, es el momento de descubrir su historia. Una noche, una joven princesa miraba apasionadamente el cielo estrellado. Se preguntaba si existían las personas y los mundos que se encontraban allá arriba.
Mientras observaba, para su asombro, empezó a ver unos destellos que venían del firmamento. Para su sorpresa, una figura hechizadora con alas divinas estaba flotando hacia ella desde dentro de las estrellas.
La joven princesa estaba asombrada ante la inesperada aparición. La figura se presentó como el príncipe de las estrellas. Explicó que había bajado a la tierra acompañado de algunas de sus estrellas para invitar a la princesa a su mundo celestial de príncipes y estrellas.
Como era de esperar, la princesa estaba fascinada, pero también un poco asustada por la idea de dejar su hogar y sus personas amadas.Sin embargo, el príncipe de las estrellas insistió en que el viaje valdría la pena.
Ellos dos, acompañados por una alegre bandada de estrellas, comenzaron el viaje hacia el mundo del príncipe. Durante él, el príncipe contó historias de sus aventuras, de la magia y la belleza de su país.
Después de un largo viaje, finalmente llegaron a su destino. La princesa fue atrapada por el encanto de aquel mundo mágico. Nadie podría explicar las cosas maravillosas con las que la princesa fue sorprendida.
Toda la noche, el príncipe y la princesa pasaron celebrando y bailando entre las estrellas, y viendo como la luna y el sol se mezclaban para crear un hermoso arcoíris de luz.
Al amanecer, la princesa empezó a llorar. El príncipe se dio cuenta de que se estaba preparando para regresar a la tierra. Estaba triste por tener que partirse del príncipe y aquel fascinante mundo.
Antes de partir, el príncipe le regaló una sonrisa y dos brillantes estrellas, una para guardar y la otra para recordar su maravilloso viaje. La princesa se puso de pie y lentamente ascendió hacia el cielo.
Luego de aquel viaje, la princesa recapituló en su corazón las preciosas lecciones que aprendió con el príncipe de las estrellas. Las llevaría con orgullo por el resto de su vida. Al príncipe y la princesa les aguarda un futuro lleno de aventuras, donde descubrirán el inmenso valor del amor y las dulces maravillas de estar juntos para siempre. Así, la leyenda «La princesa y el príncipe de las estrellas» queda escrita para la eternidad como un testimonio de la satisfacción de vivir un amor verdadero.