La princesa del Arcoíris tenía una vida tranquila en un pequeño pueblo en la provincia. A pesar de su calma diaria, ella sentía que había algo más en el mundo que estaba más allá de su vida. Ésta fue la historia de su descubrimiento de su destino real y la búsqueda de darle felicidad y color a los reinos del arcoíris. Un día, una princesa llamada Color había pasado por un hermoso bosque. Ella llevaba un lindo sombrero multicolor que le recordaba lo encantador que era este lugar.
De pronto, mientras caminaba a través de los árboles, vio un pequeño arcoíris brillante que brillaba desde lo alto del cielo. Se detuvo en ese lugar para admirar el espectáculo que tenía ante sus ojos y se preguntó si podría atrapar el arcoíris.
Con un poco de esfuerzo levantó una rama y la puso a alcanzar el arcoiris. Ella lo siguió con dedicación y finalmente logró su cometido. Una vez que lo tuvo en su agarre, se olvidó de todos sus problemas y se deslizó por el rayo de luz de colores.
Navegó entre las diferentes tonalidades y se sintió divina entre la belleza del arcoíris. Se paró en la cima y disfrutó del ambiente que la rodeaba.
En ese momento, sintió una magia deslumbrante a su alrededor y vió que había flores de colores por todas partes. Cada una de ellas tenía un brillo intenso y un aroma suave que entraba en ella.
De forma repentina, el rayo de luz se detuvo y todo se convirtió en un silencio impresionante. Estaba rodeada de flores multicolores y en el centro brillaba una rosa blanca perfecta.
La princesa no podía creer lo que quería sus ojos. Estaba rodeada de flores preciosas y de la más hermosa rosa blanca. Estaba encantada de dicha belleza y decidió quedarse allí.
Súbitamente se dio cuenta de que en el cielo ahora podía verse una reina. La princesa quedó atónita ante la belleza de la reina de los arcoiris, que irradiaba luz de multicolores.
La Reina habló y dijo: “Yo soy la Reina del Arcoiris, soy la que gobierna sobre todos mis seres amados. Te doy la bienvenida a la Tierra del Arcoiris, Color. Ahora eres la princesa y tu destino es alegrar el mundo con la magia de mi tierra”.
Color se quedó sin palabras por la majestuosa presencia de la reina. Luego, se acercó a ella y la saludó con respeto. La Reina la besó en la frente, le mostró la Tierra del Arcoiris y le dio un afectuoso abrazo.
Color estaba feliz y emocionada de que le haya sido otorgado el destino de ser la princesa del Arcoiris. Ella juró servir de la mejor manera para la Reina y sus tierras.
Y desde entonces, Color, la princesa del Arcoiris, ha vivido en su magia mundo de colores, alegría y amor. Ella realiza constantemente su trabajo con honor y se enorgullece de ser la Princesa del Arcoiris y servir a la reina para siempre. Con la magia de un arcoíris, la princesa del arcoíris se despidió de todos, volvió a su reino y volvió a renovar la magia de la esperanza. Su amorosa sonrisa se desvaneció más allá de las nubes en el cielo, dejando una huella de ilusión e inspiración que se quedó con todos para siempre. ¡Hasta la próxima!